Este retablo de Santa María la Mayor de Trujillo es el mejor retablo hispano-flamenco conservado en Extremadura y el único de los llamados de gran formato que del artista permanece en su emplazamiento original. Esta compuesto actualmente de 19 tablas grandes y 6 en la predela, esta última obra al parecer de Francisco Gallego. Se organiza en siete calles, divididas a su vez en tres cuerpos, sobre predela. Los temas representados que se han conservados son: evangelistas (santos Mateo, Marcos, Lucas y Juan), padres de la Iglesia (santos Gregorio y Agustín), y temas e la ida de Cisto y de la Virgen, La Coronación de la Virgen, Huida a Egipto, Disputa con los Doctores, Ultima Cena, Asunción de la Virgen, Purificación, Epifanía, Nacimiento, Visitación, Abrazo de Puerta Dorada, Nacimiento de la Virgen, Desposorios y Anunciación.
Además de la temática, y de la calidad técnica de la pintura, resulta de gran interés la minuciosidad con la que el artista ha elaborado su trabajo, ya que en cada una de las tablas vemos multitud de detalles de la vida cotidiana, de la arquitectura o de las vestimentas del momento.
En el centro de la la calle central se ha colocado una imagen la Virgen María realizada por Modesto Pastor en el siglo
XIX, lo que motivó que la tabla pictórica que allí existía (Cristo crucificado) se trasladara a la sacristía. La estructura arquitectónica del conjunto remite a motivos principalmente góticos (tracerías, elementos decorativos vegetales, etc.), salvo su parte superior que se remata con elementos barrocos claramente introducidos con posterioridad a la ejecución del retablo. En su parte inferior fue colocado un sagrario en 1595.