Este torso de mármol es conocido en Roma desde el siglo XV. Se encuentra en las colecciones del Vaticano desde 1536. Ha sido objeto de diversas interpretaciones. En la actualidad se identifica, como hipótesis, con el héroe griego Áyax Telamonio cuando meditaba su  suicidio, sentado sobre un animal que no se ha podido descifrar. Se cuenta que durante la guerra de Troya, el guerrero se volvió loco cuando Ulises le sustrajo las armas de Aquiles.
Se ha reconstruido la iconografía a diversos testimonios figurativos: la cabeza estaba tristemente apoyada en la mano derecha, que sostenía la espada con la que el héroe se iba a quitar su propia vida. Data del siglo I a.C. y está firmada por el ateniense Apolonio, un artista de la corriente neoática que se inspiró con toda probabilidad en una bronce de la primera mitad del siglo II a.C.  La retorcida pose del torso y su extraordinaria musculatura ha tenido influencia en grandes artistas como Miguel Ángel, Rubens, Turner, Rodin o Picasso.