Es evidente que esta estampa sólo puede referirse al
Príncipe de la Paz cuando llegó a favorito. Podemos suponer que fue
entonces cuando empezó a desempeñar el papel que más tarde ostentaría de
forma pública. Decidieron confiar su educación a Acúña, actualmente
arzobispo de Santiago, y posteriormente se ocuparon de la misma Barradas
y Mollinedo. Este último había envejecido en el Departamento de Asuntos
Exteriores y se suponía que sus largos años de servicio habían hecho de
él un gran experto. Debió sorprenderse bastante cuando le pidieron que
enseñara un tema del que nunca había sabido nada. |