Caballos de la cueva de Ekain (Guipúzcoa).

El panel principal de la cueva de Ekain (Deva, Guipúzcoa) representa caballos y bisontes y se corresponde con un santuario profundo. Su contenido artístico, junto con Tito Bustillo y Altamira es de los más importantes de la península. Atendiendo al canon estilístico, a la forma y a las técnicas, sobre todo en la ejecución de los caballos, se distingue la mano de cuatro pintores distintos, que trabajan en diferentes zonas del santuario. La figura más representada en esta cueva es el caballo, con el 57,6 por ciento de las figuras pintadas. Esta pintura tiene estrechas semejanzas con las de Tito Bustillo, de la que dista unos 200 kilómetros. Las analogías consisten tanto en la distribución del espacio como en la disposición del panel central. En ambas cavernas falta la representación de pelaje y sombreado por líneas cortas en los animales. Esto hace suponer que existía una tradición estilística con verdaderos círculos que podrían denominarse "escuelas".

Friso de bisontes en la cueva de Font de Gaume (Francia).

En este friso de bisontes de Font de Gaume la posición del suelo viene dada por la sucesión horizontal de las figuras.