Las representaciones claras de escenas de recolección de miel hay que situarlas en el período Mesolítico. Pero ya durante el paleolítico hay evidencias indirectas para establecer una relación con la miel. Se sabe que se utilizaba la cera de abeja con fines prácticos y tecnológicos, bien como combustible para alimentar lámparas o bien como componente de resinas utilizadas para enmangar puntas. Por esta razón es lógico pensar que si durante el paleolítico los seres humanos han tenido acceso a los panales de abeja para aprovechar la cera, ante debieron consumir la miel. | |
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La pintura levantina debió poseer algún sentido religioso. Los abrigos donde se ejecutaron no parecen haberse utilizado como habitación del hombre. Sin embargo, la escena de la recolección de la miel que se encuentra en el Abrigo de la Araña (Bicorp, Valencia), es difícil de señalar como de tipo religioso; sería más bien una fina observación de la naturaleza. Un individuo provisto de una cesta está hurgando en un panal. A su alrededor revolotean las abejas. El panal se representó aprovechando un pequeño hueco de la roca, con lo que la escena tiene mayor verosimilitud. Por una larga escala de cuerda parece que trepa otra figura para colaborar en la recolección. | |
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