La capilla de San Miguel, en la Cámara Santa de Oviedo tiene dos partes. Lo que vemos es la parte de la nave. A nuestra izquierda queda el ábside, hoy lugar para guardar el tesoro de la Catedral. En el siglo XII se retiró la cubrición de madera que tenía esta nave y se colocó encima una bóveda de cañón. Al mismo tiempo, se abrieron las dos ventanas que vemos y se colocaron las esculturas representando a los doce apóstoles de Jesús. La barbarie desatada en Asturias durante la Revolución de 1934 llevo a graves desperfectos a esta capilla que hubo que rehacer.