Las nínfeas o nenúfares
En 1893, Monet construyó un jardín acuático en su casa normanda de Giverny, donde planta nenúfares "como adorno para al placer de la vista y por tener un motivo bello e inagotable que pintar". Allí vivió durante cuarenta años. Durante la Primera Guerra Mundial, el artista decide realizar doce grandes cuadros con este tema para evadirse de los horrores bélicos y ofrecer, luego, su obra a la nación francesa con la condición de que fuera debidamente presentada. El acuerdo tardó en alcanzarse y en 1925 Monet da su aprobación para instalarlos en la Orangería en París, que abrió al público en 1927, un año después de fallecer el pintor.
El pintor y sus lugares

Arriba, Monet en su estudio. Abajo, en su jardín, frente al puente japonés inmortalizado en varias obras.

Monet en su jardín sobre el puente japonés, en una fotografía del New York Times de 1922. Abajo, delante de su casa.
Detalles de la obra
La casa de Monet en Giverny hoy