Téodora Markovic, más conocida como Dora Maar (Tours, 1907-París, 1997) era hija de un arquitecto croata y una francesa católica. Fue educada en Buenos Aires hasta los 19 años. Era un, fotógrafa surrealista mal conocida, pintora apenas reconocida, amante de Georges Bataille. Fue amiga de un largo número de personajes del París de los años veinte y treinta; finalmente fue amante de Picasso. Fue la que fotografió la génesis del Guernica, antes de la ruptura que la precipitó en la locura, el misticismo y la más oscura comunicación con invisibles espíritus nocturnos. Se encerró en una inquietante soledad, rodeada de numerosas obras picassianas, cuya venta la hubiera hecho millonaria, pero que ella prefirió guardar, en una suerte de cripta que sólo fue descubierta a su muerte, rodeada, apenas, de sus propios y ya invisibles fantasmas... La leyenda definitiva de Dora Maar comenzó a crecer un año después de su muerte, abandonada de todo y de todos, cuando se subastó su fabulosa colección de Picassos, el 27, 28 y 29 de octubre de 1998, en París.  Picasso realizó una treintena de retratos al óleo de Dora más un número impresionante de dibujos, esbozos y grabados, algunos de ellos de una calidad excepcional.  Deja un rastro indeleble de la importancia y el misterio de una mujer fuera de lo común.  Picasso la sedujo, amó y abandonó, como a tantas otras.  

¿Hubiera sido Dora Maar conocida y apreciada si no hubiera sido la compañera de Picasso?  ¿Si no hubiera fotografiado el Guernica?.  Al cruzarse Picasso en su camino, primero se transformó en su modelo y luego en su víctima.

Fotos tomadas por Dora Maar del proceso del Guernica.