Al principio los elementos figurativos representados eran fundamentalmente decorativos y la identificación se hacía mediante la epigrafía cuneiforme y no por los motivos representados. Más adelante se tendió al abandono de la trama de trazos o incisiones lineales para acentuar más el interés de por representado y el modelado de las figuras. La iconografía animalística, con abundancia de luchas y juegos entre distintas especies (leones, toros, leopardos, cuervos), permitía la construcción de complejas composiciones de entrelazos donde los animales suelen aparecer erguidos. El paso de los siglos y de las dinastías
no supuso para la glíptica una clara transformación formal ni iconográfica. Sí
se fue ampliando el número de posibilidades narrativas al introducir motivos
mitológicos y religiosos, banquetes, etc.
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La habilidad de los orfebres sumerios se manifiesta igualmente durante la dominación acadia. Lo hemos visto al hablar de la escultura acadia. |
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Este tipo de labor, así como la de los
frisos decorativos de algunos templos, en las que figuras talladas en concha o
en piedra caliza resaltan sobre un fondo de betún, apenas parecen tener eco en
etapas posteriores. |
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La glíptica influye en los asuntos decorativos de los frisos, con temática intencionadamente repetida que expresaba el sentido oriental de lo infinito. Estos frisos solían decorar muros externos, puertas o salones, utilizando una técnica largamente experimentada en la zona: la cerámica vidriada. A la cara externa de un ladrillo se le aplicaban óxidos, que una vez cristalizados en el horno, le daban intensos colores de transparencia vítrea. Además contribuían a la impermeabilización del muro y a su protección frente a los agentes climáticos. Numerosos edificios utilizaron este sistema decorativo, como en las puertas de Ishtar, de Babilonia (siglo VI a.C.), que poseía su frente adornado con animales en relieve, realizados en ladrillos salientes. En el mundo persa, el
palacio de Susa (siglo V a.C.) estuvo
decorado de manera similar. Es muy interesante un fragmento de una procesión de
arqueros realizados en relieve, que se repetían de forma casi mimética
extendiéndose por la parte baja del muro y constituyendo un friso con enmarque
geométrico. |
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